30 de agosto de 2015

(Filofascismo, xenofobia y embrutecimiento.)

La enorme crisis de los refugiados pone en evidencia flagrante que en Europa no gobiernan los políticos, sino los bancos. ¿Tienen algún valor económico los inmigrantes y refugiados? ¿No? ¿Afectan al balance de algún banco? ¿Tampoco? Pues entonces no existe ningún problema. Todos los gobiernos de la UE siguen en su profundo sopor, si acaso a la espera de alguna orden del BCE, que es cuando salen momentáneamente de su letargo (para unos recortes, privatizaciones, subidas del IVA, lo de siempre). Sólo ha empezado a haber cierto atisbo de problema cuando Mutti Merkel se ha dado cuenta de que o mueve un dedo aunque sea y toma la iniciativa, o la extrema derecha le va a comer el electorado en Alemania. De todas maneras, en este sentido, bien por Merkel, por supuesto, si es que va a mover un dedo. Todo lo contrario que en esta España heredera de Franco, de patética ida y vuelta al Régimen por obra y gracia del PP, y donde la extrema derecha no tiene nada que comerle a Rajoy Brey por falta absoluta de espacio (la demostración es VOX). Aquí, hace apenas unos días, en una tertulia televisiva en que se discutía el drama de los refugiados, escuché de refilón a un periodista de la derecha que preguntaba a su atónito interlocutor (el cual defendía que dar asilo a los refugiados no es sólo una obligación moral, sino jurídica de los Estados): "¿Y cuánto nos va a costar dar asilo a estos refugiados, de dónde saldrá el dinero?", preguntó el periodista, con una sonrisita triunfal de campeón absoluto del cinismo. "¿Y cuánto nos cuesta a nosotros este energúmeno?", pensé yo. Desde luego, dar asilo a los cientos de miles de refugiados nos iba a costar ni la milésima parte de lo que nos cuesta mantener a todo este ejército apabullante de energúmenos ilustrados y con corbata que, en toda Europa, cobran una pasta gansa por soltar barbaridades día tras día en todos los medios de comunicación. Lo peor es que nos estemos acostumbrando a toda esta brutalidad y embrutecimiento que anega Europa, porque los próximos refugiados vamos a ser nosotros.

Lecturas recomendadas
- Ernest Urtasun, Europa ante la mayor crisis de refugiados desde la II Guerra Mundial (30-8-2015) 

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